Lo nuestro

Y todo se fue, se evaporó. Se acabaron los encuentros, los besos, los abrazos, los ''churri'', los te quiero y los te echo de menos. Ya no queda nada, solo un baúl lleno de recuerdos más tristes que bonitos. Nos pasamos media vida sufriendo, pero no lo sabíamos. Bueno, sufría yo, tú tenías lo que querías, ¿verdad? Mi compañera de mesa del colegio tenía razón cuando me dijo esa frase que me dolió tanto pero, ¿no dicen que las verdades duelen? Pues esa era una verdad como un templo. De esas que te caen encima y que cuando te quieres dar cuenta ya es tarde. Te guardaré en el baúl de los recuerdos, no se si cabrás pero te meteré como sea. Espero que te arrepientas de muchas cosas que has echo, que veas que te equivocaste, pero que también veas que ya no hay vuelta atrás. Que hubo muchas oportunidades y tu las desperdiciaste todas. Pero quizás cuando quieras darte cuenta sea tarde, demasiado tarde. En efecto, ya va siendo tarde y tu sigues sin prestar la más mínima atención a lo que ocurre a tu alrededor.