Seguidores

sábado, 1 de abril de 2017

When June ends...

No recuerdo la última vez que abrí este blog y me paré a escribir. Quizá es que solía usarlo para contar mis miedos, mis inseguridades, mis mierdas; aunque las últimas publicaciones fueran todo lo contrario. Alomejor es que hasta ahora realmente no he necesitado tanto desahogarme como siento que debo hacerlo ahora, ya que, cuando nadie te entiende, solo quedas tú mismo, tú y tus mierdas, nada más.
Y es que nadie puede entender cómo te sientes cuando ni tú mismo lo sabes a ciencia cierta, y eso es una gran putada.
Hoy, me apetece ser sincera, me apetece abrirme al 200%, lo necesito.

Creo que solo yo sé la de mierda que tengo por dentro, desde hace años, y que soy incapaz de sacarla, por miedo a mí misma, por miedo a lo que puedan pensar los demás. Me siento una persona super insegura, tan insegura que a veces no quiero ni llorar porque me siento patética y muchas veces, creedme, me haría muchísima falta llorar durante horas. Soy super inestable emocionalmente, un día estoy muy triste y al día siguiente me da igual todo, creo que es una forma de autodefensa, de que no me afecten tanto las cosas, pero al final siempre vuelvo a recaer, a lo mismo, a la mierda. Qué asco, a veces me da muchísimo asco mi forma de ser, de actuar, de pensar... sobre todo de pensar. Mis pensamientos van y vienen, cuando se me mete algo en la cabeza, es una rumiación constante, tanto que me afecta de una forma brutal, en todos los sentidos.

Últimamente estoy más inestable que nunca, y me da mucho miedo, y sé por qué, sé por quién, y me da mucho miedo ese quién; más concretamente, lo que es capaz de hacerme sentir ese quién. ¿Es injusto estar pillada por una persona que no lo está por ti?, ¿que le ve el final a lo vuestro desde antes de ver un principio? Os lo digo yo, es muy, pero que muy, injusto, y te hierve por dentro, no sé si habréis sentido alguna vez esa sensación de tener el pecho muy caliente, de que todo te da vueltas y no sabes por dónde salir porque, puestos a ser sinceros, tampoco sabes cómo entraste. Un día, sin más, estabas ahí, rallándote, pensando en esa persona, pero pensando de otra forma, y lo peor es que un día te das cuenta de que esa persona no piensa como tú, que cuando ya no te tenga físicamente, no va a querer saber nada más de ti en el sentido que tú sí quieres saber de él, ¿merece la pena vivir sabiendo que esto tiene fecha límite? Y después, ¿qué? ¿como si nunca nos hubiéramos conocido? ¿como si no te hubieras pasado miles de fines de semana en mi casa, en mi cama, conmigo? ¿cómo se hace eso? Explícamelo tú porque yo no tengo ni idea de cómo se hace, quizá tú si sepas. Es flipante como te engancha tanto una persona que sabes que no va a ninguna parte, que no te corresponde como tú quisieras, y la gente te dice que no te ralles, que ellos te ven bien... como si desde fuera se viera la mierda, los trapos sucios se lavan en casa, ¿no? Es asombroso como mis manos están volando por el teclado, me salen las palabras a borbotones, nunca había escrito tan rápido, y me da que va para largo, lo necesito.

Como seguir... si creo que aún ni he empezado a contar, podría pasarme aquí horas. Soy una persona a la que le cuesta muchísimo abrirse, y con él... con él me lo pensé muy bien, pero al final lo hice, y creo que me equivoqué, me esperaba algo recíproco y me di de bruces con la pared, yo solita, sin ayuda de nadie, me creé mi propia historia, me monté mis pajaritos y mis cuentos, y me está pasando factura. Creo que no había sentido tanto miedo en una relación como el que tengo ahora, miedo a que se acabe, a pasarlo mal, a que me engañe... a todo, y el miedo crece y crece cada vez que pasa un día, y otro, y cada vez está más cerca el verano, el puto verano, nunca había deseado tanto que no llegase. Debería tenerlo asumido ya, cuando no se puede no se puede, bueno, cuando él no quiere, porque por mí podría y sobre todo, querría; pero no todo depende de mi, ojalá, sería todo muy distinto. 

Y me veo aquí, patética, esperando a que salga de él que le apetece verme, o que se plante en mi casa y que yo sea, por un momento, super feliz, ajena a la mierda que me persigue. Pero tengo el presentimiento de que eso no va a pasar, que, otra vez, me voy a quedar con las ganas, dándole vueltas a la cabeza.. Y es que yo también hago difícil lo fácil, con mi mierda, con mis tonterías. Hay días en los que me gustaría mandarlo todo a la mierda. Esos días pienso que no merece la pena alargar algo que va a acabar pasando, al final si espero me va a doler más, mucho más... si ya me duele, no me quiero imaginar dentro de unos meses, no quiero ni pensarlo, pero es irremediable. 

En fin, como veis, ya vuelvo a darle muchas vueltas a un mismo tema, la misma historia de siempre, la misma mierda. Y yo me pregunto, ¿qué pasará? Qué pasará hoy, mañana... en Junio, ¿aguantaré? ¿aguantarás?

No hay comentarios:

Publicar un comentario