¿Sabes cuáles son, de estos días que te levantas con ganas de algo? Pues hoy me he levantado con ganas de ti. Ganas de estar contigo, de comerte a besos y de muchísimo más, ¿te ha pasado a ti lo mismo? Si no es así, me da igual, yo puedo darte la mitad de las ganas que tengo de ti, porque me sobran. ¿Qué te apetece hacer? Si quieres, podemos ver esa película que tanto me recuerda a nosotros o, simplemente, podemos quedarnos tirados en la playa, mirándonos y haciendo tonterías. Me da igual lo que hagamos, mientras esté contigo. ¿Sabes lo malo de todo? Que me tengo que aguantar las ganas hasta que te vuelva a ver, que si no, no dudaría en plantarme en tu casa y engancharme a ti como un mono, créeme que me encantaría. Pero tranquilo, me guardaré esas ganas, las de mañana, y las del día siguiente para cuando te tenga a menos de un centímetro de mi, y ahí, si que podré ser yo, sin esa coraza que me protege.
No hay comentarios:
Publicar un comentario